POLITICA
2 de noviembre de 2023
Cocomiel cierra su mandato, pero consigue que la Legislatura valide 17.000 nombramientos de empleados públicos.
La Cámara de Diputados chaqueña aprobó la regularización de miles de trabajadores en una sesión de quorum ajustado, entre críticas de Zdero y el radicalismo; pasarán a integrar la planta permanente.
La Cámara de Diputados de Chaco aprobó este miércoles el pase a planta permanente de empleados públicos provinciales que estaban bajo contrataciones precarias, una medida impulsada por el gobernador Jorge Capitanich en el cierre de su mandato y cuestionada por el gobernador electo, Leandro Zdero. Los trabajadores que se sumarán al plantel efectivo del Estado provincial son 17.000. La decisión se oficializó en una sesión que se caracterizó por un quorum ajustado y un clima de tensión entre sindicalistas estatales y diputados opositores.
Los diputados oficialistas ratificaron decretos de Capitanich que establecieron la regularización de “trabajadores de la Administración Pública Provincial que dependen del Poder Ejecutivo, entes autárquicos y descentralizados” y de empleados contratados como “personal transitorio, con contratos de locación de servicios”.
La Cámara de Diputados (el Poder Legislativo en Chaco es unicameral) tiene 32 bancas y el oficialismo obtuvo quorum con 17 legisladores, el mínimo necesario para habilitar el debate. Se sentaron en sus bancas los diputados alineados Capitanich más los que responden al exvicegobernador Juan Carlos Bacileff Ivanoff, y se ausentaron los de los bloques de la UCR y CER (el espacio peronista que gobierna Resistencia, la capital provincial). Entre los ausentes estuvo el propio Zdero, que es diputado provincial.
El lunes, Zdero se había opuesto a los pases a planta permanente impulsados por Capitanich. Había reclamado “madurez política para que el Estado no reviente”. Desde hace dos semanas, la transición entre Capitanich y Zdero está rota, luego de que los integrantes del equipo del gobernador electo acusaran al oficialismo de esconder información y entregarles datos sesgados. En la sesión de este miércoles se hicieron presentes representantes de gremios estatales como la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), entre otros. Fuentes de la oposición señalaron a LA NACION que los dirigentes sindicales les habían preparado un escrache.
“La aprobación de la ley hoy es demostrativa de que siempre tuvieron quorum desde el gobierno provincial para tratar un plan ordenado de quienes trabajan hace años en precariedad, situaciones que vinimos planteando hace años, y no tuvimos recepción alguna por parte del bloque mayoritario. Ahora, después de tanto tiempo, aceleran tramites, pero no para los trabajadores reales, sino para los amigos y amigas del poder, exfuncionarios y legisladores”, denunciaron los diputados de la UCR chaqueña en un comunicado. Advirtieron que se dieron “centenas de pases a planta de la empresa Sameep [la empresa de agua de Chaco], que esta fundida, en Insssep [el instituto de seguridad social chaqueño], que es deficitario” y se habilitaron “concursos en Lotería Chaqueña para nuevos cargos y promociones de cargos en toda la administración”.
“No tiene razón de ser condicionar un nuevo gobierno por mostrar algo que ya sabemos: la alineación política de algunos gremios socios del gobernador, que estuvieron 16 años bastante callados. Con gritos y agresiones no van a cambiar nuestra decisión de respeto a la Constitución provincial; sí deberán explicar qué significan 17.000 nuevos empleados en materia económica y de obra social”, concluyeron los legisladores radicales.
El proyecto aprobado este miércoles había tenido su último avance el lunes, con el dictamen obtenido en la Comisión de Hacienda y Presupuesto. En la Cámara de Diputados provincial, el oficialismo cuenta con 21 diputados, mientras que la oposición tiene 11 legisladores. El lunes, Zdero (que el 17 de septiembre venció a Capitanich en primera vuelta, con una cosecha del 46% de los votos) había subrayado que el oficialismo estaba usando “un concepto tan importante como el derecho de los empleados públicos para meter ‘amigos y militantes’ por la ventana”.
Con la tensión entre oficialismo y oposición renovada, el domingo habrá elecciones en Chaco. Se elegirá intendente en Resistencia, donde los principales candidatos son, por el frente CER, Élida Cuesta (esposa del actual intendente, Gustavo Martínez); por Juntos por el Cambio, el exgobernador Roy Nikisch, y por el Frente Chaqueño (el espacio de Capitanich), Diego Arévalo, presidente del Instituto Provincial de Desarrollo Urbano y Vivienda. También se elegirán intendentes en Quitilipi y Makalle.
LA NACION