27 de marzo de 2019
Viajar es político
-Lo Personal es Político-
Viajar al ELLA en La Plata nos dejó contenido para pensar y compartir toda la vida: la convivencia en campamento con diversos cuerpos, nacionalidades, costumbres, elecciones sexuales, alimentaciones, militancias, expresiones; nos mostró que es posible generar comunidades abiertas, libres, respetuosas, cuidadosas y alegres. Viajar, compartir, convivir con otres y aprender de todo eso... es sumamente político.
El Encuentro Nacional de Mujeres es una experiencia transformadora de la que es imposible salir ilesas. Una ciudad de mujeres pensando, hablando, riendo, jugando, manifestándose, amando, bailando, abrazando, bebiendo, siendo libres le pese a quien le pese. Pero este año, a quienes vivimos en el interior de Chaco, nos separaban 2173 kilómetros para llegar a Trelew -Chubut-, un montón de horas y dinero que nos hicieron imposible el viaje. Lejos de sentirnos derrotadas, encontramos una opción: el 3er Encuentro Latinoamericano de Feminismos en La Plata.
Y allá fuimos después de vender empanadas, budines, ropa, zapatos y bebidas en eventos para juntar dinero. Una experiencia de economía solidaria, transparente, autogestiva y posible: Economía feminista.
Lo que encontramos en La Plata fue aprendizaje y convivencia. El “ELLA”, como se denomina el encuentro tiene como objetivo reunir y compartir las experiencias de los grupos de mujeres que trabajan en Latinoamérica con cuestiones de género. Y hablar, mucho, todo el tiempo. Y bailar, mucho también, ya que la propuesta del encuentro es pensar, debatir, reconocer las situaciones problemáticas, sin perder la alegría. Y en ese hablar, trabajar, discutir y bailar... vivir, vivir en un campamento de 2000 mujeres durmiendo en carpas, cantando, comiendo, comprando-vendiendo, limpiando… todo en armonía, todo en una perfectamente posible REPÚBLICA FEMINISTA.
Las primeras actividades fueron festejar el encuentro, bailar, estirar las piernas y los ánimos al ritmo de tambores poderosos y alegres en manos de las hermanas brasileras que combaten desde el ritmo, el baile y la memoria de Marielle Franco y de tantas mujeres negras que siguen sufriendo y bailando.
Las charlas estaban diseñadas como “Ruedas” y cada una tenía varias “Detonadoras” que abrían la ronda de diálogos y sentidos. Así fue como comenzamos escuchando a las mujeres negras de Brasil, Colombia, Nicaragua, Guatemala reclamar su lugar dentro de los feminismos, y la necesidad de reconocer nuestros privilegios como mujeres blancas. Esta fue una de las temáticas que sobrevoló todo el encuentro, y uno de los cuestionamientos más fuertes que nos hicieron todo el tiempo.
Taller sobre privilegios. El primer día del encuentro en el patio central al aire libre una compañera de Brasil propuso un ejercicio. Pidió que pasen al medio 10 mujeres, se formen en una línea, todas mirando hacia adelante y tomadas de las manos. La guía comenzó a realizar preguntas, por ejemplo "Si asististe al colegio primario, da un paso adelante; si tu familia acepta tu orientación sexual, da un paso adelante; si te faltó comida, da un paso atrás; si deseaste tener otro color de piel para no sentir miedo, da un paso atrás; si tenés o tuviste la posibilidad de estudiar en la universidad, da un paso adelante; si cuando buscás ropa encontrás talles fácilmente, da un paso adelante; si te violentaron utilizando pronombres que no te identifican. da un paso atrás; si te excluyeron debido a tu nacionalidad o por pertenecer a una nación originaria, da un paso atrás... de esta forma siguieron preguntas sobre sexualidad, familia, trabajo, etc. Muchas de la fila original comenzaron a quedar adelante, y muchas atrás. Una compa que participó dijo: “A medida que nombraba derechos o privilegios yo avanzaba casi siempre, y veía cómo mis compañeras se quedaban atrás, algunas ya sin estar agarradas de las manos. Reconocer que tenés un privilegio que otras mujeres no tienen, no invalida la lucha por TUS derechos. Pero si negamos estos privilegios vamos a seguir excluyendo a nuestras hermanas y compañeras. Históricamente el feminismo siempre ha sido racista, clasista y homofóbico. Hoy en día en Argentina lo sigue siendo, pensalo, pongo un ejemplo: En más de 300 exposiciones en el congreso para defender el proyecto de la campaña por el aborto legal se llenaron la boca hablando de las pibas de la villa. ¿Saben a cuántas pibas de la villa dejaron hablar? A una. Esto tiene que cambiar y tiene que cambiar ahora. Construyamos un feminismo donde se escuchen todas las voces, y cuando sea necesario, demos un paso al costado, usemos nuestros privilegios para dejar hablar a las compañeras. Lo último que quiero agregar es esto, no podemos seguir dividiendo la lucha. El enemigo es el mismo, y mientras nos siga dividiendo, seguirá triunfando” (Palabras de Magui Ascon).
Luego de esta detonación hicimos ronda y reflexionamos sobre el taller: los privilegios, los derechos y los vínculos. Cómo quienes tuvieron menos oportunidades y más discriminación en sus vidas quedaron atrás, sin manos que las sostengan, las vinculen, sin esa red que conformamos cotidianamente... muy bueno el ejercicio y luego la interpelación entre las compas... especialmente de las negras hacia nosotras, las blancas... “Creo que fue la actividad más fuerte de todo el encuentro. Lo viví como un cachetazo para despertarme. Lo más bello de todo es que gracias a eso, gracias al encuentro en sí, estamos tejiendo redes entre todas y ya no nos vamos a soltar las manos” Magui. Por otro lado, también nos dejó un gusto a poco, al menos de mi parte poder charlar con las negras, mano a mano, por el lenguaje (yo entiendo poco y nada el portugués, menos hablarlo). Creo que es proceso de construcción constante y lo seguiremos en el próximo encuentro.
La rueda “Homenaje a Chicha Mariani” nos permitió escuchar, ver y reflexionar junto a la antropóloga Rita Segato, una de las expertas más potentes de la nueva ola del feminismo argentino. “La Rita” desarrolló varios ítems que habían sido propuestos como tópicos de la charla: impunidad, justicia, memoria, reparación. “La justicia institucional toma a la sentencia como cosa, como producto y lo más importante es el proceso... eso atraviesa todas las consignas que estamos analizando (impunidad, memoria, justicia, reparación). Fuimos capturados por el MERCANTILISMO DE LA JUSTICIA, perseguimos la justicia como cosa, como producto final. Hubo un “bien colateral” de la dictadura, que fue la noción de “justo proceso” en la sociedad desde el debate, lo cual desarrolló una Inteligencia del país. Los feminismos obtuvimos algunos conceptos que nos estancan. Las preguntas que nos estamos haciendo ahora, las que nos hace Raquel (Robles, fundadora de HIJOS Capital Federal) nos ponen a pensar en los procesos. “La impunidad es parte del engranaje del sistema, no es la falla, ¿qué hacemos con eso?”.
Otra mujer presente fue Mariana Dopazo, ex hija de Miguel Etchecolatz, apropiada durante la dictadura militar, quien cambió su apellido luego de muchas luchas y desencuentros legales, políticos, un proceso de deconstrucción y construcción de identidad, nada menos. Destacó a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo como un origen, de justicia y verdad. Expresó que la violencia sufrida es irreparable, sin embargo, la dimensión de lo COLECTIVO ayuda a reparar los silencios, los traumas.
Con respecto a la impunidad, y relacionándolo con la violencia de género Segato afirmó sobre “Los feminicidios: lo que se mata es una forma de hacer política, se matan los progresos feministas. Lo que está en juego es la “politicidad nueva del feminismo”, porque la politicidad masculina tiene al Estado patriarcal en el centro. Entonces, hay un repase de la política a nuestras manos.” Hablamos de que la única terapia es la vinculante, donde se colectivizan los sufrimientos y los deseos. Rita dejó deslizar “lo personal no sólo es político sino que también es colectivo”.
También hizo un fuerte llamado hacia dentro del feminismo, lanzando preguntas para seguir pensando “¿qué es lo contrario a la impunidad? ¿es la punición? Eso es un mal par, ESCAPEMOS DE LOS BINOMIOS. NO QUIERO UN FEMINISMO DEL ENEMIGO, esa es una estrategia del fascismo. Quiero UN MUNDO SIN HEGEMONÍAS. ¿puede un Estado cruel hacer justicia? que exista un “justo proceso”, no un linchamiento. Tenemos que cuidar los progresos del feminismo, la experiencia e historia del feminismo. “CUIDADO que la mujer de mañana no sea el hombre que estamos dejando”. Sus palabras quedaron girando en el ambiente, pulsando en los cerebros, resonando en los corazones, y desde su inmensa generosidad, esta inmensa intelectual se quedó un rato largo conversando con sus seguidoras, que la atormentamos a preguntas y anécdotas en un after delicioso.
La ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo tuvo su ronda por un lado con las Socorristas en Red de Chile y Argentina que relataron la forma en que trabajan desde el llamado telefónico hasta el seguimiento de la toma del misoprostol y el acompañamiento que se hace de las mujeres que deciden acudir a ellas, y por otro lado la campaña por el Aborto Seguro, Legal y Gratuito tuvo sus representantes. Aquí las principales referentes contaron la historia, las formas de lucha que se vienen diseñando, y sostuvieron la idea de no hacer un show de la campaña por el aborto, y de considerar que la legalización sería solo el primer paso, ya que todo el sistema de salud deberá prepararse y adaptarse.
Otra de las rondas de las que pudimos participar fue el ELLAS CUENTAN, donde diferentes grupos contaron sus vivencias. Así pudimos conocer a las mujeres uruguayas que han logrado incluir en el carnaval medidas de cuidado e inclusión para las mujeres. También escuchamos a las madres que cultivan cannabis medicinal (para sus hijos con diferentes afecciones como Parkinson, autismo, etc) quienes relataron el camino que debieron hacer para lograr la legalización de la hierba, y las nuevas perspectivas que se abren al buscar fuera de la medicina tradicional un paliativo para sus hijos.
Otro de los relatos fuertes de esta ronda fue el de las compañeras de Costa Rica que llevan adelante “Casa Rara”, un refugio para jóvenes que han sido expulsados de sus hogares, sobre todo porque sus familias no aceptan que sean gays. En “Casa Rara” les dan refugio, les alimentan y cuidan de manera integral con una sola condición: que estudien. La experiencia fue relatada por una de las responsables de la casa donde contó que había hecho el esfuerzo de llegar hasta allí porque necesitan aprender cómo seguir adelante con su proyecto. También escuchamos el relato de miembros de una de las organizaciones trans que logró la Ley Integral para personas Trans en Uruguay, a partir de la cual se garantizan medidas para combatir la discriminación y garantizar derechos a la vivienda, el trabajo y las intervenciones quirúrgicas. Ellas contaron el camino de construcción democrática que hicieron para lograr no sólo la ley, sino el trabajo conjunto de más de 30 agrupaciones que se unieron para el proyecto.
Con la temática “Placer - La última frontera” nos encontramos con mujeres de Brasil, Honduras, Chile, Colombia, Argentinas, etc...y pudimos contar experiencias, sorprendernos y solidarizarnos con quienes han vivido experiencias difíciles. Aquí una de las detonadoras fue Luciana Peker, quien viene investigando y escribiendo sobre el tema y sostiene que las nuevas oleadas de violencias contra la mujer tienen mucho que ver con el coraje de las mujeres de gestionar su DESEO. Deseamos y salimos a buscar nuestro deseo, algo que al patriarcado le resulta imperdonable.
También hubo dinámicas de taller, como el de ESI (Ley de EDUCACIÓN SEXUAL INTEGRAL) con detonadoras uruguayas que propusieron elegir frases de canciones conocidas (Manzanero, Cacho Castaña, Calamaro, Shakira, Spinetta, Charly García, etc.), armar grupos, debatir sobre el texto y ver qué mitos sobre la mujer se encuentran. La propuesta luego fue cambiar la letra, hacerla con perspectiva de género y feminista. Cada grupo cantó la canción con las nuevas letras, hubo risas, complicidades, sentimos pequeñas y genuinas justicias . Un excelente taller no sólo por la reflexión que genera sino también como dinámica útil y fácil para replicar.
El taller de Afropunk estuvo a cargo de mujeres brasileras que propusieron a partir el movimiento de sus cuerpos, desentrañar las raíces de cada baile, su significado: pedían a los dioses fertilidad, liberación y agradecimiento por vivir, poder alimentarse. El movimiento del pubis golpeando hacia adelante, para abortar. Nos quedó claro que tienen mucha más práctica que nosotras, prácticas ancestrales, de música, ritmos y alegría... al otro día nos dolía todo el cuerpo pero seguimos bailando.
Distintas propuestas de talleres nos acercaron a nuestras potencialidades, nos abrazaron a mujeres de toda América Latina, nos mostraron los privilegios de las mujeres blancas, la lucha de las mujeres de todo el continente, la potencia de la lucha feminista y la posibilidad de aprender de las experiencias colectivas, bailando y celebrando el encuentro.
Viajar al ELLA en La Plata nos dejó contenido para pensar y compartir toda la vida: la convivencia en campamento con diversos cuerpos, nacionalidades, costumbres, elecciones sexuales, alimentaciones, militancias, expresiones; nos mostró que es posible generar comunidades abiertas, libres, respetuosas, cuidadosas y alegres. Viajar, compartir, convivir con otres y aprender de todo eso... es sumamente político.