SOCIEDAD
14 de marzo de 2018
Madre a los 40 años, ¿por qué no?
La maternidad tardía también tiene sus beneficios, basicamente estamos hablando de un gran acto de amor.
Muy a diferencia de lo que sucede en nuestro país como en el resto de Latinoamérica, en España la edad media de la maternidad es de las más tardías de Europa; sólo el 50% de las mujeres han tenido su primer hijo antes de llegar a la treintena.
Y aunque no es lo mismo ser madre a los 20 años que cerca de los 40, en las últimas décadas se han producido muchos avances médicos gracias a los cuales el embarazo en etapas avanzadas es hoy viable y más seguro. En la actualidad, retrasar la edad de la maternidad es una tendencia social en auge, y de hecho hay muchas famosas que son madres después de los 40.
Además, la madurez aporta muchos beneficios a la maternidad, distintos a los que proporciona la juventud, pero igual de necesarios.
Estas madres suelen planificar más el momento de formar una familia. Gracias a esta planificación, son capaces de establecer un vínculo muy cercano con el futuro bebé incluso antes de que se produzca el embarazo, y a su vez este vínculo las ayuda después a aceptar su rol de madres sin problemas.
Uno de los datos más significativos que arrojan las estadísticas es que los casos de depresión posparto son menos frecuentes cuanto mayor es la madre.
PRECAUCIONES
Ante todo, es importante que mantengas una actitud positiva y realista. Tené en cuenta que los avances médicos de las últimas décadas han hecho posible que el embarazo de una mujer madura esté mucho más controlado. Y no sólo eso: el aumento de este tipo de embarazadas ha dado muchas pistas a los especialistas acerca de las complicaciones más comunes.
También, cuanto mayor es la mujer, más saludables son sus hábitos: está más concienciada de los efectos nocivos del tabaco para ella (aumenta la presión arterial ligada a la preeclampsia) y para el bebé (riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer), así como de la importancia de comer fruta y verdura y hacer ejercicio.
Por último, has de saber que en las ecografías prestarán especial atención a la cantidad de líquido amniótico, al adecuado crecimiento del feto y a la posición de la placenta: es más común que se sitúe en el tercio inferior del útero que en una madre más joven, aunque lo más probable es que emigre hacia la zona media-alta del útero a medida que éste aumenta de tamaño.
Fuente: http://www.crecerfeliz.es/Embarazo/Cuidados/maternidad-a-los-40/embararazo-a-los-35-anos
14/03/2018